
CAFARNAÚN, EL POBLADO: LOS HABITANTES
Epifanio afirma que, hasta finales del siglo cuarto d.C., la
población de Cafarnaún era enteramente judía: "La tradición que prohibe
a toda raza distinta habitar con ellos (con los judíos) está en vigor
especialmente en Tiberíades, en Diocesarea (Séforis), en Nazaret y en Cafarnaún".
Además, algunos pasajes de la Mishna subrayan el hecho de que, durante los tres
primeros siglos de la era cristiana, la población hebrea de Cafarnaún estaba
compuesta de dos grupos distintos: de una parte los hebreos ortodoxos y de otra
los llamados "Minim" o heréticos. Del contexto se deduce que estos
Minim de Cafarnaún eran de los hebreos convertidos al cristianismo, es decir,
de los Judeo-cristianos.
Ya antes de la segunda guerra judía del año 135 d.C., la comunidad cristiana
de Cafarnaún había escalado las altas esferas del judaísmo ortodoxe y había
intentado convertir a la secta al rabino Hanina, sobrino del célebre rabino
Jehoshua: "Hanina, hijo del hermano de Jehoshua, vino a Kefar Nahum y los
Minim lo sedujeron y le hicieron montar en un asno el día de sábado. El se
presentó al amigo Jehoshua, que lo ungió con el óleo y lo curó. R.
Jehoshua le dijo: "Puesto que el asno de esta perversa persona (Jesús?)
se ha ensañado contra ti, tú no puedes ya vivir en la tierra de Israel. El
se marchó entonces a Babilonia, donde murió en paz" (Midrash Qoh Rabba,
1,8).
Dos siglos más tarde, entre finales del siglo tercero y los primeros decenios
del siguiente, los Judeo-cristianos de Cafarnaún se habían multiplicado
tanto que el Rabino Issi de Cesarea llegó al extremo de condenar en bloque a
los habitantes de esta población. Y lo hace de tal manera que comenta el
versiculo Qoh VII, 26, refiriénse a los Minim: "Es bueno Ananías, el
sobrino de Jehoshua; son malos los hijos (los habitantes) de Kefar Nahum"
(Midrash Qoh Rabba, VII, 26). De este pasaje no ha de sacarse la conclusión
de que, en esta época, todos los moradores de Cafarnaún pertenecían a los
Minim; pero, por otra parte, R. Issi difícilmente habría podido lanzar este
grave juicio contra los hijos de Kefar Nahum", si los Minim hubieran sólo
constituido una porción insignificante del lugar.
Es difícil decir con exactitud cuándo y en qué medida los cristianos de la
Gentilidad suplantaron a la comunidad judeo-cristiana de Cafarnaún. Se puede
sostener con rigor que la iglesia octogonal de la segunda mitad del siglo
quinto fue construida por los cristianos de origen Gentil.
En la época bizantina, los Judeo-ortodoxos siguieron viviendo en Cafarnaún
junto con los Cristianos, cuyo número fue aumentando en el ínterin de modo
considerable. Tal crecimiento de los Cristianos entre la población de Cafarnaún
se deduce del frecuente uso de platos de tierra sigilada con el símbolo
cristiano de la cruz. Esta cerámica de importación aparece en muchas
viviendas de los barrios hasta ahora excavados.
A principios del siglo séptimo, es decir, al comenzar el periodo árabe,
muchas casas fueron abandonadas y se convirtieron en ruinas: esto permite
suponer la salida de parte, al menos, de la vieja población de Cafarnaún,
tanto hebrea como cristiana. El abandono de la sinagoga y de la iglesia
octogonal da a entender que la población de Cafarnaún se convirtió poco a
poco a la nueva religión musulmana.